Quizás sea la berenjena mi
verdura favorita, ese sabor tan peculiar que tiene ella me chifla, la cocino
mucho y ya tocaba hacerle honor. Hay mil formas de comer la berenjena, ya os pondré más cositas pero hoy os
propongo esta receta que es bastante sencilla y deliciosa para no variar,
además es un plato equilibrado porque lleva de todo. Sí, soy una chica
práctica! Me gusta cocinar, eso está claro pero hay veces (pues como le pasa a
todo el mundo) que no te apetece y optas por algo rapidito y que lo lleva todo.
Así que una vez más, os sirvo una receta rica, rápida y fácil. Es verdad que muy espectacular a la vista no es pero gana mucho en sabor...
1/2 cebolla
2 tomates naturales
2 berenjenas
400 g de carne picada (de cerdo
o de ternera, si os gusta complicaros un poco la vida como yo, podéis comprar
salchichas y sacar la carne, así cambia un poco de la misma carne picada de
siempre ;) )
Parmesano o cabra o mozzarella o queso
curado…. Lo que queráis
Queso rallado emmenthal
Nata liquida
Miel
Tomillo
Sal y pimienta
Aceite de oliva
Lo primero es cortar las
berenjenas en dos, longitudinalmente, echamos sal y pimienta, un poco de aceite
de oliva y metemos al horno precalentado a 200ºC durante 25 min más o menos.
Vigilamos que no se quemen.
Mientras tanto, picamos la
cebolla en juliana y la freímos. Cuando esté doradita, añadimos el tomate
natural en trozos pequeños. Una vez que obtenemos una especie de mermelada,
echamos miel y tomillo y por fin la carne picada. Cuando esté cocinada la
carne, reservamos.
Tenemos las berenjenas listas,
sacamos la pulpa con cuidado para no romperlas ayudándonos de una cucharita y
la añadimos a la preparación. Removemos bien, añadimos un poco de nata,
salpimentamos y repartimos la mezcla en las berenjenas.
Cortamos unos copos de queso parmesano
o unas lonchas de queso de cabra, aquí os dejo elegir el queso que más os
guste, se puede echar más de uno, yo es lo que hago porque soy una loca del
queso. Al final queso rallado y metemos al horno, hemos bajado la temperatura
previamente a 180ºC. Una vez derretido el (o los) queso(s) las sacamos y listo
para comer! Qué rico!!
Bon appétit!!
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